Lo que te cura, en un futuro, te enferma más. Medicina moderna o medicina alternativa, ¿cuál es la mejor opción?

En el presente trabajo se abordarán las ventajas, desventajas y diferencias de la medicina moderna o alópata y la medicina alternativa, con el fin de destacar sus importancias clínicas en la selección y empleo de tratamientos específicos en los pacientes, con los fines principales bioéticos hipocráticos de la no maleficencia y beneficencia. De la misma forma, se expondrán los mitos, creencias y cualidades de elección actuales en los pacientes ante la medicina moderna y la medicina alternativa.

¿Cuántos no nos hemos enfermado y tomado antibióticos para sentirnos mejor? La verdad es que, muchas veces, los medicamentos que tomamos solo están desvaneciendo los síntomas y no la causa inicial de estos, provocando con ello, a futuro, la presentación de otros síntomas ya sean de la misma enfermedad no erradicada del todo o de una complicación.

Pero no es la medicina moderna la única opción a la hora de buscar una sanación. Existe también la medicina alternativa, la cual se basa en el equilibrio de nuestro organismo y en un tratamiento no tan agresivo como lo puede llegar a ser el de la medicina moderna, es por ello que podríamos decir que la medicina alternativa es mejor que la moderna puesto que presenta menos efectos secundarios dañinos para la salud.

Es aquí donde se crea la incógnita de cuál es la mejor medicina al momento de tratarnos alguna enfermedad, ¿cuál es la mejor opción? Para poder elegir y llegar a una conclusión necesitamos conocer a nuestros protagonistas; la medicina moderna y la medicina alternativa y ya con esto, crear un juicio con base en evidencias.

En primera instancia, se define como medicina tradicional a una amplia variedad de terapias y prácticas que varían de países y regiones, también se le conoce como medicina alternativa o complementaria y se viene utilizando desde hace muchos años. (OMS, 2018). Además, el Diccionario de la Real Academia Española la define, siendo más específico a la medicina homeopática, como un sistema curativo que aplica a las enfermedades, en dosis mínimas, las mismas sustancias que, en mayores cantidades producirían al hombre sano síntomas iguales o parecidos a los que se trata de combatir (Pérez, 2015).

Sin embargo, es aquella derivación de la medicina que afirma tener efectos sanadores de la medicina moderna, pero no está evidenciada mediante método científico, por lo que lleva a una tendencia de creer que solo produce un efecto placebo.

Por el otro lado, la medicina moderna o alópata se define por el Diccionario de la Real Academia Española como la terapéutica cuyos medicamentos producen en el estado sano fenómenos diferentes de los que caracterizan las enfermedades en que se emplean (Pérez, 2015).

Esta se fundamenta en evidencias científicas y reside en la solución de la enfermedad suministrando sustancias fármaco-biológicas, creando así la incógnita de si estas sustancias dañan más de lo que curan o, también, de si estás sustancias les causan o no una farmacodependencia.

Durante dicha práctica, el médico más que revisar al paciente revisa la sintomatología para poder acabar con ella con algún medicamento específico. Este medicamento tiene efectos rápidos porque actúan con la manifestación patológica local y el dolor que lo sucede, sin embargo, no retira el agente causante, provocando que exista la posibilidad de una reaparición de síntomas, inclusión de algún síntoma diferente o aumento de enfermedades paulatinas que se pueden asociar al tratamiento medicinal aplicado. Con esto, podemos decir que la medicina moderna es una medicina de urgencia y/o de auxilio.

Recordando finalmente que, los objetivos de todas las medicinas existentes siempre serán conservar la salud, aliviar o curar la enfermedad y evitar la muerte prematura. Pero también comparten las funciones naturales y características del ser humano: el efecto benéfico de una buena relación médico paciente, la tendencia natural del organismo a resistir agresiones y regresar al estado de salud, la influencia favorable de la terapéutica ya sea químicamente efectiva o en forma de placebo.

Referencias

OMS. (01 de Octubre de 2018). Medicina tradicional. Obtenido de http://www.who.int/topics/traditional_medicine/es/

Pérez, R. (2015). La medicina alopática y las otras medicinas. Revista de cultura científica UNAM. Obtenido de http://www.revistaciencias.unam.mx/en/159-revistas/revista-ciencias-14/1376-la-medicina-alop%C3%A1tica-y-las-otras-medicinas.html

Sobre el autor

Daniel Armando Villarreal Portillo.

Licenciado en Médico Cirujano por parte de la Universidad de las Américas Puebla. Egresó con Mención Cum Laude, siendo el mejor promedio de su generación. Galardonado con el Premio a la Excelencia Académica por el Instituto Científico Pfizer y la Asociación Mexicana de Facultades y Escuelas de Medicina.

Contacto: daniel.villarealpo@udlap.mx