Un contador para el mañana
Hace cien años una materia del plan de estudios de los contadores era Caligrafía. Un contador debía tener buena letra; todavía hace cincuenta años un eminente socio de un despacho de auditores veía los papeles de trabajo de su mejor encargado de auditoría y le decía: ¿Quién debe ver esto? –¿Por qué? –Para darle una aspirina, por el dolor de cabeza que...