Espora No.15
Carta Editorial
Detrás de la ensoñación pasillos breves de limitadas formas. Sueño líquido, vapor que canta, mariposa para desgranar. Entré entusiasmado para gozar de mi primer espectáculo circense. Una puerta se abre. El jóven entró a su habitación. Una brevedad que oprime. Casa deshabitada. Pensar en un mundo mínimo. Un gran debut jamás es justo ni merecido. Y tú te atreves a tener un nombre. Un estrecho transcurrir.
Era el signo preciso de algo que se escondía en aquellas bóvedas magmáticas. Una brevedad que hiere. Una especie de trance negro. Detenerse ante el esplendor. Todo lo suyo, lo imaginaba perdido. Las tormentas no traen nada bueno. Una brevedad que aquieta. Por el contrario, el mundo exhibe una absoluta indiferencia.
– Los editores