Espora No. 11
Carta Editorial
Presentamos al lector un conjunto fugitivo de textos. Algunos aparecen como cartas misivas, historias migrantes sobre traslado. Podría hablarse de un elenco de la movilidad que surge repe-tidamente: el pájaro, la máscara, el barco, el cazador, el camino. A esto sigue un innegable protagonismo del tema de la identi-dad, del jadeo ante la certeza de no ser más que una geometría fragmentada o un pedazo de nadie.
El intento por lograr la comunicación es el binomio de este pavimento de personalidades. Promesas, búsquedas y empleos fáticos del lenguaje se construyen en un léxico del lugar, que tran-sita por templos y poblados, montañas y planetas; pero en oca-siones las cúpulas dejan espacio a tiempos de origen y a recorri-dos hacia edades de olvido. Así pues, he aquí el devenir de un destino de manadas, el arder de una multiplicidad frente a la decisión de huir.
– Los editores