Redes automotrices
¿Para qué se necesitan 40 computadoras en un automóvil? La respuesta es: para intercambiar información y controlar el vehículo con el objetivo de hacerlo seguro, eficiente, confortable y entretenido.
Buscamos cada vez más que el automóvil sea una extensión de nuestro hogar, que podamos ir a nuestro destino cómodamente. Hoy en día queremos automóviles eficientes, cuyo consumo de combustible sea poco, que cuenten con sistemas de asistencia como el de Antibloqueo ABS, el Sistema Electrónico de Estabilidad ESP, el Sistema de Bolsas de Aire e incluso con Suspensión Activa y, desde luego, con sistemas de seguridad e inmovilización en caso de intento de robo.
Para lograr estos objetivos, el vehículo cuenta con computadoras llamadas ECU (Electronic Control Units), las cuales controlan una parte del auto e intercambian información, formando las llamadas redes automotrices.
Estas redes automotrices, a su vez, están divididas de acuerdo con su desempeño. Así, tenemos a la Red de Tracción que se encarga de controlar el tren motriz y está constituida por las ECU del motor, ABS y la de la caja de transmisión. La segunda es la Red de Konfort que se encarga de la comodidad de los pasajeros e involucra a varias ECU, como las de las puertas, el BCM (Body Control Module), que se encarga del habitáculo, el aire acondicionado, las luces, el techo corredizo, entre otros. La tercera es la red Infotainment que tiene como objetivo brindar a los pasajeros información y entretenimiento. La comunicación de estas redes está basada en diferentes protocolos especializados, así encontramos los protocolos CAN (Controller Area Network), LIN (Local Interconnect Network), MOST (Media Oriented System Transport) y Flexray.
La información esencial para la operación del vehículo viaja en mensajes entre ECU, a través de las redes, usando alguno de los protocolos. En la medida en que más ECU sean incorporados al vehículo, mejores características tendrá. En promedio, un auto de categoría intermedia tiene entre 15 y 25 ECU, en autos de lujo este número puede llegar a 40 y seguirá creciendo con la adhesión de funciones como la detección del conductor somnoliento, que al detectarlo, lo alerta para que se mantenga despierto o incluso impide que maneje en malas condiciones. Entre otras, veremos en el futuro funciones que involucren la comunicación entre los autos, y que permitan, por ejemplo, avisar el nivel de congestionamiento de la vía en la que se encuentran, o que, conociendo su posición, indiquen automáticamente donde hay un bache; sistemas que limiten la velocidad directamente desde la ECU del motor en hospitales o escuelas, a través de un transmisor inalámbrico, evitando la colocación de topes o vados, y muchas más funciones que en este momento son ciencia ficción, pero que en corto tiempo serán realidad, gracias a las redes automotrices.
Acerca del autor: maestría en Ciencias con Especialidad en Ingeniería Electrónica, Universidad de las Américas Puebla. Licenciatura en Ingeniería Electrónica y Comunicaciones, Universidad de las Américas Puebla.
Por: Mtro. Eduardo López Sánchez
Jefe de Laboratorio del Departamento de Computación, Electrónica y Mecatrónica, UDLAP
eduardo.lopez@udlap.mx