Los retos de la traducción

Los retos de la traducción

El acto de traducir significa transmitir un mensaje codificado en una lengua de origen a una lengua meta, puede ser de manera literal, palabra por palabra, o de una forma libre, usando palabras y estructuras diferentes, pero conservando la idea y el mensaje del texto original. Desde hace más de medio siglo se ha intentado hacer traducciones a máquina, pero sólo en los últimos años han mejorado notablemente los traductores automáticos: aún se necesitan humanos para llevar a cabo esta labor.

¿Es fácil traducir? ¿Cualquier persona que domina otro idioma puede hacerlo? Comúnmente es lo que piensa la gente. De ahí viene el hábito de algunas empresas de pedir traducciones a un empleado que tiene competencia en algún idioma, aunque ésta sea muy básica. De ahí vienen las traducciones mal hechas que abundan (por ejemplo, en Internet). No obstante, existen programas de licenciaturas, maestrías e incluso doctorados de traducción en varias partes del mundo lo cual comprueba que para esta labor es recomendable aprender cómo ejercerla. Gracias a los esfuerzos de las organizaciones profesionales y la teoría de la traducción, los traductores e intérpretes son cada vez más reconocidos, aunque aún carecen del pago y trato justos.

¿Por qué es una labor difícil la traducción? A veces son necesarias ciertas adaptaciones a la cultura del público meta, ya que existen muchas expresiones en una cultura que presentan huecos semánticos en la otra, es decir, que no están presentes, por lo que el traductor tiene que decidir cómo traducirlas. Para esto existe la traductología, la cual sugiere usar ciertas estrategias y hacerse consciente sobre el proceso de la traducción, del porqué usar una palabra y no otra en la lengua meta, de por qué omitir o añadir palabras o incluso oraciones, etcétera. Por ejemplo, las palabras tortilla y tequila casi siempre se usan en otros idiomas como préstamos, sin traducirlas. ¿Pero cómo se procede con las expresiones idiomáticas? Medir algo «a ojo de buen cubero» o «no tener pelos en la lengua» no se pueden traducir de manera literal, más bien se tiene que buscar una expresión idiomática equivalente en la otra lengua y, si no hay, su significado se debe parafrasear, es decir, explicar, aunque se pierda lo característico de la cultura origen. Una expresión equivalente en inglés para «a ojo de buen cubero», sería a rule of thumb y una paráfrasis based on rough estimates. Para «no tener pelos en la lengua» no existe una expresión idiomática equivalente en inglés por lo que se parafrasearía con to mince ones words.

Hay un sinfín de ejemplos de por qué no es fácil traducir. Esta tarea no sólo implica tener una alta competencia lingüística en las dos lenguas, sino también una competencia cultural que sólo se adquiere estando en contacto frecuente con hablantes nativos y visitando los países respectivos.

Acerca del autor:

Estudió dos carreras llamadas DIPLOM en la Universidad de Leipzig, Alemania, Traducción e interpretación de alemán, inglés y español además de periodismo como disciplina secundaria (1999). Cuenta con un certificado especial como intérprete simultáneo de inglés y español, también por la universidad de Leipzig (1999) y una maestría en la enseñanza de alemán como lengua extranjera por el Instituto Herder de la Universidad de Leipzig (2000). En 2005 obtuvo el Diplomado en Pensamiento Crítico por la UDLAP de cursos de familiarización y actualización del Programa de Actualización Docente. Actualmente es Profesora de Tiempo Completo en el Departamento de Lenguas desde 2000, en donde ha sido coordinadora del área de alemán (2001-2008) y del Centro de Aprendizaje de Lenguas (2008-2010) así como miembro de varios comités internos. Tiene más de 11 años de experiencia impartiendo clases de alemán de nivel universitario de varios niveles y más de 15 años de experiencia como traductora e intérprete de los idiomas alemán, español e inglés. Además, ha laborado en el área del periodismo en periódicos y radio de 1995 a 2001. Su carrera de profesora de alemán inició durante sus estudios cuando impartía clases particulares y con una práctica en la Universidad de Guadalajara (UDG) becada por el Servicio Alemán de Intercambio Académico (DAAD). Ha trabajado como profesora también en la UDG y en el Instituto Goethe de Guadalajara. En la UDLAP ha impartido cursos de alemán de varios niveles usando varios métodos de enseñanza, así como la materia de Teoría y Práctica de la Traducción, los cursos de Traducción Escrita y Traducción Oral de inglés y Español Avanzado y un curso de Inglés Intermedio (ID 102). Sus áreas de interés son la traductología, en especial los enfoques funcionalistas, el uso de la traducción en las clases de lenguas extranjeras, aspectos culturales en la traducción, así como la enseñanza del alemán, el aprendizaje auto dirigido y los centros de auto acceso de idiomas. Desde 2000 ha participado como ponente y asistente en múltiples congresos de traducción e interpretación, la enseñanza del alemán, el aprendizaje autónomo y los centros de auto acceso de idiomas y he publicado artículos sobre estos temas. Desde 2010 es miembro de la mesa directiva de la Asociación Mexicana de Profesores de Alemán (AMPAL), hasta el 2012 como vocal y desde 2012 como secretaria.

Por: Mtra. Ulrike Sperr

Profesora de tiempo completo del Departamento de Lenguas, UDLAP

ulrike.sperr@udlap.mx

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